El Azor fue usado como barco de recreo por el general Franco. Después es larga la historia. Fue vendido por la Armada española, cuyo requisito implicaba el desguace.
El artista NMAC Fernando Sánchez Castillo compró el Azor a finales del 2011; 46 metros de eslora, 400 toneladas de aluminio moldeado. Lo ha convertido en chatarra y lo ha llamado, «Síndrome de Guernica», presente en el espacio Abierto x Obras, la antigua cámara frigorífica de Matadero Madrid.
El bloque tiene forma de prisma. No es casual que haya perdido todo su significado al transformarlo en un bloque de acero y aluminio, en una escultura minimalista enorme. Como el mismo artista explica: «Cuando se quiere comprimir mucho el significado de algo, se realizan prismas por sus formas puras, ideales. En este, caso el barco contenía tanta narrativa, que sólo cabía esta opción.» No es mera coincidencia que el título haga referencia al Guernica: «Del mismo modo que Picasso trabajó con el cubismo para relatar un hecho histórico, yo he comprimido un hecho histórico en una forma cúbica.»
Con esta obra, el artista, ha quitado el significado a uno de los últimos referentes franquistas, según sus propias palabras: «Resume una historia paradigmática de lo que son las tres últimas etapas históricas de nuestro país: la dictadura, la transición y el imperio de la economía.»
«Síndrome de Guernica», una obra que no dejará indiferente a nadie.
Fernando Sánchez Castillo. «Síndrome de Guernica». Matadero Madrid.
2O de enero al 18 de marzo de 2012.